Un acuerdo para gobernarlos a todos.
Así es como las web de New Zealand llaman al pacto alcanzado estos últimos días por los ministros del país y por la Warner Bros respecto a las películas de El Hobbit.
Hasta 34 millones de dolares en recortes de impuestos y ayudas con los costes de comercialización de las películas, así como un urgente cambio de la legislación laboral, son el precio que el gobierno de Nueva Zelanda pagará por mantener las producciones de El Hobbit en el país.

El acuerdo fue alcanzado tras dos días de intensas negociaciones y el anuncio ha sido ampliamente aplaudido excepto por el Green Party que dijo que los planes de cambio de la ley laboral son escandalosos.

El trato mantendrá el proyecto de 670 millones de dolares en Nueva Zelanda creando miles de puestos de trabajo así como turismo y exposición internacional. Además Nueva Zelanda se ha asegurado que una de las premieres mundiales de la película sea allí, y Peter Jackson trabajará para promover el país como un sitio de turismo en el material digital de los DVD que se espera que tenga una audiencia internacional de diez millones.
A cambio el gobierno compensará los gastos de marketing con unos 10 millones de dolares americanos y pagará unos 7,5 millones de dolares para liberar de ciertos impuestos a las películas. En total, el coste para el gobierno será de menos de 100 millones de dolares neozelandeses, que según el Primer Ministreo Mr. Key compensan las oportunidades para el turismo de Nueva Zelanda.

Al parecer, una fuente cercana a las negociaciones ha declarado que el tema principal que preocupaba a los estudios de la Warner era el tema de la contratación y de los contratos independientes, y que una vez que el asunto estuvo resuelto el tema se centró principalmente en el dinero. La subida del dolar neozelandes últimamente no era algo que la Warner no supiera, pero fue las dificultares con el gremio de actores lo que les hizo que pensaran en ir a otro sitio, aunque al parecer los incentivos en impuestos de otras localidades eran mucho más atractivos que en Nueva Zelanda.

La nueva legislación se aplicará a la industria del cine, no sólo a las películas de EL Hobbit, y asegurará que los trabajadores de películas contratados como contratistas no puedan luego demandar en corte a las productoras diciendo que son empleados. Dice que el cambio dará a los trabajadores certeza acerca de su estatus desde el momento en que son contratados.
El cambio de la legislación se llevará al parlamento en breve, y como tiene el apoyo de Act and United Future partido, será suficiente para que pase a ley inmediatamente. Ha levantado algunas polémicas que una empresa haya forzado el cambio de una ley con efecto inmediato en un país, pero Mr. Key ha dicho que no se podían permitir perder el contrato y que han hecho todo lo necesario para evitarlo.

Fuente: Nz Herald Co

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